Ante la información publicada en el día de hoy por el Diario El Mundo, en la que se acusa a la Confederación Sindical UGT de financiarse con fondos para la formación, queremos manifestar lo siguiente:
1. Es rotundamente falso que la Confederación Sindical UGT se financie con fondos para la formación de los trabajadores. La imputación que se hace en el citado diario, en portada y con grandes caracteres tipográficos, no se sostiene ni fundamenta ni siquiera con los datos que se recogen en el mismo cuerpo de la información.
2. Los fondos de formación para el empleo proceden de la cuota de formación profesional que pagan empresarios y trabajadores, que se gestiona por el Estado y las Comunidades Autónomas y en cuya ejecución participan de forma importante las organizaciones sindicales y empresariales.
3. UGT está fuertemente comprometida con el objetivo de la formación permanente de los trabajadores y la mejora de su empleabilidad. Por ello, y como instrumento para la gestión de la formación de los trabajadores, constituyó una fundación sin ánimo de lucro, IFES, una de las entidades de formación para el empleo más reconocidas de nuestro país.
Asimismo queremos dejar constancia que Antonio Retamino, Tesorero de UGT, ni es, ni ha sido nunca, gerente ni cargo ejecutivo de IFES, sino únicamente Secretario de su Patronato.
IFES imparte formación en toda España, dispone de 190 centros con 664 aulas acreditadas por las distintas administraciones públicas para impartir certificados de profesionalidad, en 120 especialidades acreditadas. Igualmente dispone de una plataforma de teleformación para 186 especialidades formativas. Su plantilla media en 2012 ha sido de 1.052 trabajadores, de los que 724 fueron personal docente, 310 administrativos y técnicos y 19 directivos.
4. A lo largo de los últimos 10 años, de 2003 a 2012, IFES ha formado a 1.038.559 alumnos, tanto trabajadores ocupados como desempleados. En el año 2012 la cifra total de alumnos formados ha sido de 72.031, de los que 38.176 han sido trabajadores ocupados (el 53,7%) y el resto trabajadores en paro, con un total de 6.391.198 horas de formación.
5. En el ejercicio 2012 los fondos gestionados por IFES fueron de 47,5 millones de euros, de los cuales 19 millones se destinaron a formación de trabajadores desempleados (el 40% del total), 26,3 millones a trabajadores en activo (el 55,4%) y los 2,2 millones restantes a Acciones Complementarias a la Formación y becas y ayudas a los alumnos (el 4,6%).
De los 47,5 millones de euros, 14,2 millones fueron subvenciones directas de la Administración a IFES, y los restantes 33,3 millones provienen de contratos firmados con otras entidades, principalmente organismos de UGT que han sido beneficiarios de subvenciones públicas y siempre por actividades relacionadas con la formación.
De los 14,2 millones de euros de subvenciones directas a IFES, el 27% proviene de fondos estatales, el 71,8% de administraciones autonómicas, y el resto de otras administraciones públicas.
Y de los ingresos por contratos con otras entidades, especialmente con organismos de UGT, el 21,05% proceden de fondos estatales y el 77,58% de fondos autonómicos.
6. Formación 2020 y Localmur se crearon por IFES con la finalidad de gestionar adecuadamente los recursos que se utilizan en los cursos de formación. Aportan material formativo y libros, de acuerdo con la Ley del Libro, así como equipamientos y en muchos casos aulas. Las inversiones que han realizado estas empresas no las habría podido realizar IFES, y permiten que las instalaciones utilizadas estén actualizadas y sean de calidad.
Todas las actividades y operaciones realizadas por estas entidades están auditadas y analizadas por una empresa externa que emite un informe en el que se indica se realizan a precios de mercado.
7. Las cuentas de IFES, así como de Formación 2020 y Localmur, sociedades participadas por la Fundación, son completamente transparentes, y están auditadas e inscritas en los correspondientes registros públicos. En el caso de IFES las cuentas consolidadas se encuentran inscritas en el Protectorado del Ministerio de Educación.
En su contabilidad a 31 de diciembre de 2012 IFES recoge una deuda neta a su favor de organismos de UGT de 17 millones de euros, y no de 23 millones, puesto que en aquélla se incluyen anticipos entregados por UGT a IFES.
En su mayor parte, 16 millones, corresponde a subvenciones para formación de las Comunidades Autónomas (CCAA). Las administraciones autonómicas generalmente anticipan una parte de la subvención al inicio, a veces un 25%, pero en muchas ocasiones no pagan el 100% hasta varios meses después de finalizados y justificados los cursos. A pesar de esto, UGT tiene la obligación, y la cumple, de haber pagado el 100% de la subvención en el momento de la justificación. Si no lo hiciera así tendría que reintegrar los fondos.
IFES contabiliza su producción según va ejecutando los cursos. Esos apuntes contables generan una cuenta deudora a su favor donde se registra esa producción, pero esa deuda no es exigible hasta que no se factura. El hecho de que en la Memoria y balance de IFES del año 2012 aparezcan cantidades pendientes de pago indica que se trata de cursos que se han ejecutado o se están ejecutando y aún no se han facturado y terminado de pagar. En la Memoria se distingue con claridad el concepto y situación de estas cantidades. En el caso de organismos de UGT lo que está facturado supone unos 5 millones de euros, mientras que lo pendiente de facturar o justificar, no exigible aún en esa fecha, eran unos 18 millones de euros, de los que 7 millones se habían cobrado ya como anticipos.
Confundir deuda de UGT a favor de IFES con financiación de la UGT es una burda falacia que no se sostiene.
8. Reiteramos que es falso que la Confederación Sindical UGT se financie con fondos para la formación de los trabajadores. Se trata de acusaciones falsas que se amparan en la impunidad de gruesos titulares de periódico, en un ataque sin precedentes a UGT y a las organizaciones sindicales.
UGT se defenderá frente a esas acusaciones, ejerciendo las acciones que considere oportunas, y explicando ante los trabajadores y ante la ciudadanía el alcance y sentido político que tales acusaciones tienen, para debilitar la función histórica y constitucional que UGT viene realizando en nuestro país, en defensa de los trabajadores.
UGT no se financia con fondos para la formación de los trabajadores